Renacer de una clínica tras sucumbir al fuego.
Una clínica en el campo de refugiados iraquí de Bajed Kandala quedó destruida por un incendio en diciembre de 2022, este campo acoge a 14.000 personas desplazadas internamente pertenecientes a la comunidad Yazidi.
Nueve personas, entre las que se incluyen seis profesionales de la salud, trabajan a jornada completa en esta clínica y en el adyacente centro comunitario.
La reconstrucción de la clínica tras el incendio acabó con todos los ahorros de la Organización. La intervención de la Fundación Poremma hizo posible que se reanudaran los servicios médicos y obstétricos en un momento clave, de manera que las personas que viven en el campo de refugiados tuvieran de nuevo asistencia.
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